Es curioso, pero terminé de crear mi sitio web escribiendo este primer artículo. Nunca es fácil hablar de uno mismo, pero aquí estamos. Esta no es una historia de éxito (al menos por ahora). Soy una pequeña marca de joyería entre muchas otras que lleva 4 años intentando dejar su huella. Empecé como muchos creadores vendiendo en Etsy (lyscie.etsy.com/) y decidí dar un paso más porque Etsy ya no me conviene, demasiadas tarifas, demasiada competencia, pérdida de autenticidad y falta de personalidad.
Tuve mucha suerte de poder crecer en los años 90. Mi única gran decepción en ese momento fue la ruptura de las Spice Girls pero afortunadamente llegó Britney. En aquella época (no hace mucho) usábamos mucha imaginación para entretenernos, debido a la falta de smartphones y el Dorothée Club no duraba todo el día. Mi abuela nos llevó a mis primos y a mí a una pequeña y encantadora tienda de perlas ubicada en mi ciudad, Salon de Provence. Siempre me sorprendía cuando iba allí. Fue gracias a mi abuela que nació mi pasión por la joyería y la moda en general. Me encantaba hacer vestidos para mis Barbies, pulseras con forma de flores y pequeños cocodrilos con cuentas de semillas.
A medida que crecí, desarrollé otra pasión, la del espíritu empresarial. El 8 de marzo de 2019 (girl power) creé oficialmente mi propio negocio como actividad complementaria a mi trabajo como gerente en distribución masiva. Ser empleado me permite autofinanciarme y no presionarme demasiado. Por el momento es un compromiso bastante bueno.
Esta actividad creativa me permitió conservar mi alma infantil y muchas veces me motivó a salir de períodos de mi vida a veces complicados. Poder vender mis creaciones y recibir críticas positivas me produce una inmensa alegría y satisfacción.
Hoy quiero llevar mi marca lo más lejos posible, transmitir mensajes positivos y alegrar un poco vuestros días.
Con este blog te mostraré detrás de escena de la fabricación y hablaremos de muchas otras cosas ;)